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Cómo elegir un césped artificial: las características
¿Sueñas con un césped verde y tupido, pero sin las tareas de cortar o esparcir el abono, sin las sesiones deportivas de escarificación o rodaje? El césped artificial es para ti. Pero en los últimos años, la oferta de césped artificial se ha vuelto pletórica y los precios se duplican. Para elegir tu césped sintético, debes conocer todas las características.
Césped artificial, ¿Qué es?
El césped artificial es un revestimiento tejido que imita las briznas de hierba. El principio de fabricación, el tufting, es el mismo que el de la alfombra: los hilos que imitan la hierba se tejen rectos en bucles más o menos apretados, sobre un soporte. En función de la altura deseada, los bucles se cortan y se enderezan solos.
A continuación, la parte posterior del soporte se recubre con látex o poliuretano para fijar el conjunto. La calidad del soporte determinará la longevidad del césped artificial. A continuación, se hacen agujeros de drenaje para permitir que el agua de lluvia se escurra.
Diferentes elementos determinan la calidad y el precio de un césped artificial
- El material de las láminas de césped artificial: Están hechas de polímeros (materiales plásticos), el polipropileno tiene una buena relación calidad-precio y proporciona un hilo de tacto suave. La poliamida es el material más noble y más caro.
- El peso de las fibras de césped artificial: Esta característica indica la finura de las hojas de césped. De hecho, es una medida del peso del hilo de polímero utilizado para fabricar la hierba. Se mide en Decitex (Dtex) y es el peso en gramos de 1 km de hilo.
- Las diferentes formas de las hojas de hierba: Tienen diferentes formas para imitar mejor las hojas de las hierbas: Con costilla central, en forma de C, en forma de V, en forma de W o plana.
- Cuchillas con memoria de forma: Las cuchillas con memoria de forma se enderezan después de ser pisoteadas sin que tengas que cepillarlas.
- Color: Cuanto más matizados estén los colores de las briznas de hierba, más «real» parecerá la hierba. El césped de calidad ofrece varias tonalidades de verde, así como briznas más pequeñas y rizadas de color amarillo pajizo para imitar realmente la hierba natural. Sobre todo, evita el césped brillante, que tiene un aspecto menos natural y tiende a calentarse con el sol.
- El número de cuchillas por m²: Cuanto más alto sea el número, más denso será el césped (en promedio de 346.000 cuchillas/m² a 534.000). Ten cuidado, un césped demasiado denso será menos realista.
- La altura de las briznas de hierba: depende principalmente del estilo de hierba que se quiera imitar (22, 35, 42 o 50 mm de altura).
- Resistencia a los rayos UV: Un criterio muy importante para garantizar que tu césped sintético no se desvanezca al cabo de unos años.
- Capacidad de absorber el calor: En verano, el césped artificial podría ser criticado por almacenar el calor. Esto ya no es cierto hoy en día porque algunas fibras, por el contrario, absorben los rayos del sol. En caso de sobrecalentamiento, siempre puede rociar la superficie sintética con agua.
- Resistencia al desgarro: Evita todo lo que esté por debajo de 45 Newtons porque tu césped sería demasiado frágil. Debe poder utilizar tu césped sintético como un césped natural, caminar, correr, jugar e incluso rodar sobre él.
- Resistencia al cloro, a los productos de mantenimiento, a los excrementos de animales, etc.: Un césped de calidad debe resistir a los «accidentes» siempre presentes. Y para su uso alrededor de una piscina, debe resistir los productos de desinfección del agua.
- Drenaje de agua: La parte trasera del soporte tiene agujeros de drenaje para evitar que el agua de lluvia se estanque. Elije preferentemente un césped con capacidad para evacuar al menos 60 l por minuto y por m².
- Césped con o sin relleno: Las nuevas generaciones de césped sintético para el placer son sin relleno de arena o sílice.
Comprobar todas estas características antes de comprar te permitirá determinar el precio adecuado. Cuanto más «sofisticado» sea el césped sintético, más caro será.
Aunque la instalación y la preparación previa sea diferente, el resultado sea cual sea la superficie siempre es el mismo, un césped artificial perfecto que aporta una nueva imagen y más vida a una terraza, azotea o jardín y mucho más sencillo de mantener que un césped natural ya que no necesita ser regado, secado ni abonado.
Por lo que este tipo de césped es perfecto para las personas que no disponen del tiempo necesario para realizar las tareas de mantenimiento o simplemente desean eliminar esa necesidad pero seguir disfrutando de césped.
Césped artificial, utilización de arena
Cuando los usuarios deciden instalar césped artificial en una superficie sabe de antemano que eso significa menos mantenimiento y un césped siempre perfecto sin necesidad de regarlo ni segarlo.
Preparar previamente el terreno para que el césped artificial quede perfectamente anclado al suelo y no crezca maleza debajo, si el terreno es de tierra. Si el terreno es hormigón o algún tipo de baldosa, se limpia previamente para que no queden restos debajo del césped.
Después de colocar el césped artificial en la superficie que desees, se procede a rociar arena en éste con el fin de rellenar las irregularidades de la capa inferior del césped y le añada peso para que evitar que se levante con el tiempo.
Se recomienda que si se percata de irregularidades en el césped pasado un tiempo contacta con el proveedor para que vuelva a realzar este paso añadiendo más arena y por lo tanto más peso para mantener el césped artificial en su sitio y proporcionando una superficie homogénea y natural al tacto.
Importante, la cantidad de arena
El paso de rellenado de arena es recomendable que sea realizado por profesionales ya que únicamente ellos saben la cantidad y el tipo de arena que se debe rociar para no estropear el césped artificial o llegar a taparlo si se hecha demasiada.
